LUCIO

Lucio Urtubia un retrato en clave de Jazz
Cuando me llamaron para este proyecto enseguida entendí que la propuesta encerraba un reto dramatúrgico que me obligaba a cambiar mi forma de trabajar, quizás por eso, no dudé un instante en aceptar el desafío.
¿Cómo plantear un espectáculo teatral que no se sostuviera en la acción ni en el diálogo? ¿Cómo escribir una obra sin prácticamente diálogos? ¿Cómo partir de dos obras (el cómic y el disco) para crear una tercera?
En definitiva, el reto estaba en encontrar un lenguaje que permitiera una relación directa y transversal entre el cómic, las entrevistas y el jazz. En esta búsqueda entendí que no podía ceñirme a un desarrollo argumental al uso y que quizás más que perseguir un biopic o una biografía escénica debía centrarme en desarrollar un retrato cubista de Lucio Urtubia. Poner en conversación distintos puntos de vista a través de una asociación emotiva que guiara al espectador por un mundo casi onírico. Presentarle al público preguntas, impresiones, momentos vitales, más que un séquito de anécdotas, así, poco a poco, empecé a diseccionar el cómic de Belatz, para hablar a través de sus trazos.

Tergiversando el orden original de las viñetas traté de mantener una narrativa ágil y comprensible para el espectador, de alguna manera lo diseccioné para rearmarlo dramáticamente en un formato que tuviera más teatralidad. Pero echaba de menos la voz de Lucio y me di cuenta de que con la proyección de las viñetas no había suficiente y que necesitaba mezclarlas con entrevistas reales, de Lucio sí, pero también de personas muy cercanas a él.

Para mí era importante invocar a Lucio, que sonara la voz de Lucio en el espectáculo como si fuera un músico más. Perseguía conseguir que conviviera la proyección de entrevistas (la recreación del pasado) con la acción directa y la improvisación inmanente en el jazz (el presente más absoluto).

Pienso que el espectáculo sugiere en todo momento un diálogo abierto con más preguntas que respuestas entre el pasado y el presente. De hecho ¿qué es el teatro si no hacer presente el pasado?